Tim Cook presenta un nuevo sistema operativo móvil con importantes cambios en el aspecto y diseño que ha acompañado al software desde que apareció el iPhone
No es que el partido haya empezado de cero. Tampoco es que la raqueta ya no reparta éxitos a diestro y siniestro o que el brazo ejecutor de esos derechazos haya perdido parte de su fuerza. Sin embargo, los rivales ya han aprendido y las bolas no se le cuelan tan fácilmente por línea de fondo. El mundo de la tecnología juega desde hace poco un set dentro de un encuentro global en el que lo que parece decidirse es el liderazgo en el mundo de los dispositivos móviles. Y Apple, el que en los últimos años era el jugador más destacado del gremio, ya no se encuentra tan cómodo en este nuevo escenario. Las cosas siguen yendo bien pero no con la brillantez del pasado año. Una situación propiciada, entre otras cosas, porque parece agotado el bote de las esencias del difunto Steve Jobs. No hay más cera en esa vela y es hora abrir de nuevo frentes. «Les presento IOS7 el mayor cambio desde el iPhone», dijo Tim Cook en la presentación del pasado martes, jaleado por ‘wows’ a cada novedad que presentaba.
Aunque se mantiene el espíritu del sistema operativo móvil que ha acompañado a los terminales de Apple desde que lanzasen su primer teléfono, los cambios son llamativos. Colores, texturas y formas que seguro generarán un largo debate entre su fiel parroquia con los principales cambios: nuevos iconos, diferente presentación de los mismos, fondos menos recargados y nueva función de desbloqueo. Cambios orientados a hacer una presentación más limpia y moderna de sus productos. Cambios que no fueron recibidos con euforia por los inversores. A las 19.00 horas española (momento de arranque del acto) las acciones estaban en 448 dólares y, tras presentarse las novedades, su valor caían diez dólares.
Las aplicaciones y funcionalidades también han sufrido su particular metaformosis. Es el caso, por ejemplo, de la interfaz de la predicción del tiempo o la cámara de fotos, Safari, el navegador web que ya se había quedado algo viejo; o Photo Stream, que se integrará con iCloud -el servicio de almacenaje en la nube- permitiendo, entre otras cosas, galerías de fotos colaborativas. Siri utilizará como motor de búsqueda Bing (de Microsoft), estará integrado con Wikipedia y su metálica voz también cambiará, permitiendo elegir un tono masculino o femenino. La multitarea estará disponible con todas las aplicaciones y habrá un nuevo panel de preferencias, transformado de arriba a abajo.
«Esto tampoco sorprende», afirmó de manera jocosa Cook, cuando explicó que los dueños de un iPhone utilizan el doble de tiempo sus móviles que aquellos que tienen uno equipado con Android. Aquellos que tengan un iPhone 4 o superior o al menos un iPad de segunda generación podrán acceder a la actualización en otoño.
Otro de los capítulos abordados -y muy rumoreado en los días precedentes- afecta a una de las ‘vacas sagradas’ de la compañía: la música. Los californianos presentaron su nuevo servicio de música: iTunes Radio con el que pretenden competir con Spotify, Pandora o con Google, que también desveló recientemente su propia plataforma. En este caso, será gratuito con anuncios y tendrá una versión ‘premium’ para suscriptores de iTunes Macht (tiene un coste de 25 dólares al año). Se podrá sincronizar con Twitter para conocer lo más escuchado y poder componer listas en función de ello. El catálogo se compondrá de hasta 200 cadenas y «un increíble catálogo de música de la tienda iTunes».
OS X ‘Maverick’ y renovación de los ordenadores
WWDC. Bien podrían ser las siglas de cualquier agencia norteamericana o de una fundación benéfica. Estas cuatro letras esconden tras de sí uno de los encuentros más esperados en los mentideros especializados: la conferencia de desarrolladores que anualmente celebra Apple. Su programa cuenta ya con más de seis millones de afiliados que agotaron en 71 segundos las entradas para el evento que estos días acoge San Francisco.
Como dicta la lógica, el software tiene un peso fundamental en un foro de esta naturaleza. En otras ediciones, sirvió para presentar las novedades del sistema operativo para los ordenadores de la factoría de Cupertino y en esta ocasión se ha dejado ver el nuevo OS X, al que han bautizado como ‘Maverick’. Entre las principales novedades, el usuario podrá etiquetas documentos, se ha mejorado el soporte multipantalla, tendrá pestañas y, además, incorporará aplicaciones de sus terminales móviles como iBooks, Calendar y Maps, que el pasado año les causó más de un disgusto por su mal funcionamiento fuera de Estados Unidos.
Las notificaciones podrán contestarse sin tener que abrir el programa correspondiente y la autonomía, esa gran preocupación de todo equipo, durará bastante más, según las promesas realizadas por Craig Federighi, uno de los altos cargos de la compañía. Federighi señaló que “el asesino real de la batería es carga de la CPU” y que estos niveles se consiguen rebajar hasta un 70% en esta nuva versión. Saldrá a la venta en septiembre.
